Haremos una lista de hoteles rurales para viajar con niños que tienen mucho encanto y que puedes encontrar por España. Todos van a prestar un lugar relajado, campestre, con un ritmo muy distinta al urbano donde podrás tener enormes momentos en familia. La primera fotografía forma parte a Entre Olivos Viejos, que lo vas a encontrar en Benicolet, Valencia.
En Infiesto, Asturias, está La Pontiga, un hotel que los peques adorarán por las ocupaciones propuestas para . ¿Qué te parece un seguimiento de huellas?
El Mangranar, en Atzeneta del Maestrat, Castellón, te va a dar privacidad y cubrirá exactamente los mismos servicios que los más destacados hoteles urbanos, pero en un emplazamiento fantástico.
La Calma de Rita la puedes localizar en Esponellà, Gerona, y además de tener un ambiente privilegiado, los peques viajantes van a tener la posibilidad de dar paseos en burro o formar parte en tareas propias del campo.
La Real Posada del Indiano es otro de esos hoteles con una ambientación muy divertido. Aparte cuenta con 1500 metros cuadrados de jardines para que los niños exploren. Podemos aprovechar, de paso, para fijarnos en la atractiva decoración. Encontramos este hotel en Cidones, Soria.
Estrella Rural tiene muchas ocupaciones infantiles, pero también una peculiaridad: sus habitaciones están nombradas con héroes mitológicos. Pide reserva en Baraojos, La capital española.
El rincón de Doña Urraca está escondido en Anievas, Cantabria. Precioso para descubrir la relevancia de proteger el medioambiente.
El corral del concilio está en uno de los pueblos mucho más pequeños de España, en concreto en Murillo de Gállego. Un lugar perfecto para desconectar de la civilización y pasar ratos muy agradables en compañía de la naturaleza.
La abadía de los templarios, en La Alberca, Salamanca, puede ser un destino muy atrayente para pasar unas noches rodeados de enigmática historia. Un ambiente idóneo para conocer misterios y pasárselo a lo grande.
Fuente: Charhadas
